en un azul que no enciende un rojo,
en un rojo que no aclara el morado,
mi mente se refugió en un lugar lejano,
en un momento de colores...
vive ahí, esperando

Siempre tuve miedo de hablar
de mis momentos,
pero ese miedo
y esa perdida en mi mente
llegó al fondo.
Ahora no hay colores
que regresen,
hoy no...
Hoy se escribío
"Demente"
hoy el pensamiento se quedó
a mitad de camino,
sepultó la última de mis imágenes,
-ni yo misma recuerdo como soy-
Me quedé dormida,
me quedé atrapada,
encadenada,
confundida.
Vivo la tortura del invierno que inventé.
No hay más de mi nombre,
no hay más fechas en que pueda regresar,
no hay equipajes
ni despedidas tristes,
se queda la continuación suspendida,
sin final...
Ahora conozco un yo
que no era mío
o una imágen mía
con un yo verdadero,
escucho a alguien que nunca entendí
y tal vez sea el verdadero dueño
de lo que he vivido.
-No hay puerta para regresar de uno mismo-
.
.